miércoles, 18 de febrero de 2015

Analogía de la Vida y el Chocolate

Hace unos día conversaba con un amigo en las redes sociales... le contaba todo lo que habían sido estos días... (la verdad nada fáciles) ha sido un ir y venir de sentimientos, pues esto de volver a la soltería no ha sido de lo más grato y menos una tarea ejecutable (en estos detalles debo asumir que amo la técnica... en ella no debes pensar mucho)... No me acostumbro a la casería de la soltería, a ese exótico mundo al cuál uno se expone cuando es "pateada" (después de muchos años de amor) y menos me acostumbro a tanto joteo barato... En 4 años y medio las cosas cambian mucho en uno, no se si para bien o mal... pero la percepción de las cosas cambian y bastante... (díganme pacata, pero prefiero vivir de otra forma esta etapa de reinvención personal)

No obstante, la separación ha estado llena de aprendizajes... pues, sí ha sido muy grato el proceso personal, toda una renovación mágica de la juventud que veía algo perdida (con breves 24 primaveras de historia, quizás he vivido mucho y eso me ha hecho sentir un poco vieja curcuruncha), pero el tema es que recupere esa chispa juvenil, el aire de cambio, las amistades y la familia (...las tengo muy de cerca [hey chicos tranquilos no me pegare un tiro... la verdad no, todo de alguna forma ha sido digerible, extrañamente digerible]), no ha faltado la invitación y me he enfrentado a locuras que tal vez no las habría hecho antes por tiempo, dinero, no me atrevía o no quería vivirlas sola (siempre espere vivirlas con el "amor de mi vida")... finalmente igual las he vivido sola... En fín la verdad duele y es que a veces estoy algo muy loca...

Volviendo entonces, le contaba a mi amigo que uno de los motivos que él quería para mi era: que "Disfrutara la Vida" (oh si que idiotez!!!!!, como si no la disfrutará con él (la verdad es que disfrutaba mucho, de otra forma, pero mucho... no se como surgió tal motivo y boludez en su cabeza)... pero bueno, uno no esta en su cabeza... y la decisión es de él yo ya dije gran parte del todo y mi corazón esta intacto y virginal [ok-ok-ok... buenoooo esta sólo para él])...

Pero en ese "Disfrutar" había algo muy parecido entre la vida y el chocolate, donde cada uno degustaba algo diferente... y en eso contextualizo esta Analogía interesante de compartir...

El degusta la parte dulce del chocolate, donde su anhelada libertad llega a sus manos... (la verdad siempre lo deje ser muy libre, no soy la típica mina celopata ni tan anticuada... pero ¡¡bueno!!)... yo degusto en cambio la parte amarga, donde si bien ambos disfrutamos la vida (ese retorno a nuestro zen), lo hacemos desde veredas diferentes... donde yo atravieso su indecisión y choco con su parada de la vida como de sopetón... mientras el cree que dejándome en libertad yo podré encontrar algo mejor (la fauna me asusta enserio, y no es una ironía)...

Quizás piensa que yo tal vez estoy comiendo el trozo más dulce... pero NO, disfruto de la amargura (que si bien es sabrosa igual) y queda en el paladar ese pequeño amargor (no necesito de un hombre para ser feliz, pero es agradable y bonito tener un buen compañero)... Digamos que me gusta más el dulce... pero el amargo tiene aprendizaje, tiene ese choque, ese gustito que te deja saciado...

Quizás él también se tomará algo amargo cada día, es probable que su café de las mañanas no es tan endulzado como todos los días pero sobrevive...

Pero bueno eso ya no depende de mi... yo ya estoy comiendo mi gran cuota y bocados de amargor desde hace rato... ¿Disfrutando?: Sí, de otra manera: "Viviendo y no sobreviviendo"...

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